BEATIFICACIÓN DE MADRE CARMEN
RENDILESMARTÍNEZ
Por Carmen Martínez
Hoy 16 de Junio de 2018, solo sigo siendo una más, entre
tantos feligreses que aun sin ser canonizado tiene el Venerable y Siervo de Dios
Dr. José Gregorio Hernández, que piden y oran por su pronta beatificación y
santificación, y todo gracias a un hermoso legado y encargo de devoción, que mi
querida madre María Tiziana Sánchez de Martínez me dejó años antes de partir, hacia el doctor de los pobres y necesitados
como más se le conoce, pero sobre todo hacia ese hombre como cualquiera de
nosotros que durante su vida terrenal fue un fiel servidor amoroso de Dios, con
una fe inquebrantable por encima de toda ciencia y lógica, con una fortaleza espiritual
y una capacidad de servicio hacia los demás que daban muestra de su vida en
santidad según los mandamientos de Dios ya fuere en su vida personal o
profesional.
Estas virtudes hicieron posible que fuera proclamado Siervo
de Dios y Venerable, durante el papado de juan Pablo II, por lo menos ella pudo
ver que le fuera conferido este título y lo contenta y feliz que se puso.
Recuerdo como si fuera hoy cuando ella me decía -“Escribe sobre el en tu blog o
donde te comuniques con otras personas”, - “pide por que sea canonizado, que se
unan en oración muchos a ver si Dios nos escucha más rápido”. Es una lástima
que ella no esté aquí cuando eso suceda, pero yo me alegraré por ella y seré
tan feliz como lo sería.
Cuantas canonizaciones
se han realizado desde la última vez que escribí el último relato publicado y
cuantas se están llevando a cabo en estos momentos que escribo éste, solo espero
que al ser publicado y ustedes puedan leerlo, sigan apoyando sin desmayo en las oraciones y
peticiones para su Causa de Santificación, para que la suya llegue muy pronto a
ser una de ellas, que los dos milagros que hacen falta para su canonización (beatificación
y santificación) se den, puedan ser validados y aprobados y si es posible sea
tanta su intercesión ante Dios, que Él lo bendiga no solo con dos sino con
muchos más, donde quiera que sus devotos estén diseminados en Venezuela y el
mundo entero pidiendo su Venerable intercesión.
He pasado un buen rato sin escribir, pero algo sucedió en
este hermoso día que ha hecho que vuelva a hacerlo y justamente con esta serie
de relatos sobre el Venerable Dr. José Gregorio Hernández… una gran bendición
ha caído sobre nuestro país ávido de cosas buenas, maravillosas, milagrosas
entre tantas vicisitudes que se viven, se trata de una celebración muy
especial, hermosa y maravillosa por demás, hoy 16 de Junio de 2018 en el
estadio de beisbol de la UCV, en el estadio Universitario de Caracas, se
celebró la beatificación de la Venerable y Sierva de Dios Madre Carmen Elena Rendiles
Martínez, esto cae como un bálsamo divino, que no solo cura sino que
también alegra el alma y el espíritu de un pueblo que se siente honrado y feliz
por tan hermoso acontecimiento, tanto para la beata Madre Carmen Rendiles como
desde ahora se le proclamará en la Iglesia Católica Venezolana y toda su
feligresía.
Su beatificación estuvo a cargo del enviado especial del Papa
Francisco, el Cardenal Ángelo Amato, quien estuvo acompañado de 45 obispos de
la Conferencia Episcopal Venezolana, contó a su vez con la asistencia de
religiosas de distintas congregaciones y de sus devotos, entre ellos la
bendecida con su intercesión, la prueba testimonial de su milagro, la Dra.
Trinett Durán de Branger, fue muy
emotiva para todos los presentes y los que pudieron seguirlo por televisión y
las redes sociales. Y es allí donde hubo ese momento maravilloso que me hace
cada vez más tener esa esperanza y esa fe en Dios de que pronto sucederá lo que
anhelamos y pedimos, que se logre validar ese milagro tan ansiado para su
beatificación; justo ese momento cuando el Cardenal Ángelo Amato dijo en su
discurso …-“la situación de la Causa del Dr. José Gregorio Hernández”, donde
hubo una aclamación que duró un buen tiempo, el tiempo que el Cardenal aprobó y
permitió demostrar, para decir…-”la situación de la Causa del Dr. José Gregorio
Hernández está en esta situación, falta el milagro, falta el milagro”, … -“No
cabe duda que sus virtudes son admirables”; así mismo, nos exhortó a todos a
“orar al Señor por un milagro”. Por ese milagro que hace falta para su beatificación
y yo pido que oremos por otro más necesario para su santificación, y el otro
milagro que le hace falta a cada una de nuestras 3 beatas para que los 4 sean
glorificados con su santidad, que
alegría sería que se den al mismo tiempo y estén juntos en una misma celebración, mayor dicha no
puede haber… podría ser eso posible, solo Dios tiene la respuesta.
Hoy, el Venerable Dr. José Gregorio Hernández está allá en el
cielo contento porque una coterránea suya,
de este país y de esta vida mortal en la Tierra que compartieron en sus
respectivas épocas antes de ser glorificados con la vida eterna en presencia
del Señor; haya sido bendecida con esta proclamación aprobada por Dios, de la
mano y gestión del Papa Francisco. Un paso más en su canonización, hacia ese
altar de santidad que muchos quisieran gozar muy cerca del Dios Trino Vivo,
Padre Hijo y Espíritu Santo, de la Madre de Jesús, María Santísima asunta al
cielo, de todos los Ángeles y Arcángeles y Santos que le preceden.
Y por ello me uno a su regocijo desde esta humilde página,
desde este humilde relato, agradeciendo como todos los venezolanos, feligreses
de la Iglesia Universal, por su beatificación, ¡Que viva nuestra 3era beata
venezolana!, con inmenso júbilo de corazón lo hacemos, pidiéndote Madre Carmen que
desde ahora seas también nuestra intercesora ante Dios y su amado hijo Jesús y
ante nuestra Madre, la intercesora superior, la Virgen María Santísima, porque
ella va después de aquel que está sentado a la derecha del Padre quien es
nuestro intermediario e Intercesor Divino ante el Padre Eterno, Cristo Jesús Nuestro
Señor y Salvador, por la beatificación y santificación del Dr. José Gregorio
Hernández, pero sobre todo por nuestro querido país Venezuela, actualmente en
una decadencia abismal, que ni en aquellos tiempos de tu santa vida terrenal viviste,
porque de seguro que la entrega servicial hubiese sido mayor, no solo por la
crisis país, la crisis humanitaria que enfrentamos, sino por la crisis que en
su interior libran los venezolanos, que no solo se enferma su cuerpo sino también
su corazón, alma y espíritu de sentimientos que los alejan del camino de Dios.
Para aquellos que no la conocen, la Madre Carmen Rendiles,
quien en este mundo se le llamó por el nombre de Carmen Elena Rendiles
Martínez, fue una religiosa que nació en Caracas el 11 de Agosto de 1903 y
murió a sus 73 años el 9 de mayo de 1977. Digno ejemplo de conocer y seguir, de
que no importa la condición física que se tenga
si se tiene fe y plena capacidad de brindar amor, comprensión, caridad,
bondad y misericordia hacia los demás, todo es posible si se confía en el
Señor. Ella nació sin su brazo izquierdo, pero éste no le hizo falta en incondicional
entrega durante su vida terrenal al Señor, a Jesucristo y a la Virgen María,
tenía muchos dones recibidos del Espíritu Santo al servicio de los enfermos y
necesitados, llevando una vida en santidad, solo a la espera del llamado
divino, a gozar del éxtasis pleno ante la presencia del Señor Trino vivo, su
único objetivo terrenal, su único anhelo celestial, preparase para ese gran
día, siendo una obediente y humilde sierva.
Su vida religiosa se realizó en la Congregación Siervas de Jesús
en el Santísimo Sacramento de origen francés
en Venezuela, razón por la cual funda en 1966 la Congregación de las
Siervas de Jesús de Venezuela, de la
cual fue su superiora hasta su muerte. La causa de su Santidad fue abierta en
el año 1995 a solo 18 años de gloriosa partida, durante el papado de Juan Pablo
II, en el año 2013 el Papa Francisco reconoció sus Virtudes heroicas otorgándole el Título de Venerable, en 2014
se abre y concluye la investigación de un milagro en Venezuela y se envía al
Vaticano, en 2017 el Papa Francisco decreta próxima beatificación, la cual es
uno de los motivos de este relato hoy 16 de Junio de 2018. Su Fiesta Litúrgica
es el 9 de Mayo.
El milagro que hizo posible su beatificación se realizó en la
persona de la Dra. Trinett Duran de Branger, una médico cirujano que sufrió una
descarga eléctrica mientras realizaba una operación quirúrgica en el Hospital Miguel
Pérez Carreño de Caracas, que le dejó su brazo su brazo derecho con algunas
atrofias y paralizado. Pero su devoción y fe hacia la Madre Carmen Rendiles quien
intercedió ante Dios a su favor, obrando un milagro en el año 2003, por obra y gracia del
Espíritu Santo recuperando su brazo sin necesidad del procedimiento quirúrgico que
debían realizarle, o mejor aún, como lo reconoce el Papa Francisco… “una
curación milagrosa, instantánea, estable y duradera” que le permitió no solo
volver a trabajar sino también pintar porque es una artista plástico también.
Ahora ella está al lado de sus predecesoras, la Madre de San
José Alvarado y la Madre Candelaria de San José de quienes quiero aprovechar
también esta oportunidad para que las conozcan todos aquellos que no la
conocen, y tengan en cuenta junto con el Dr. José Gregorio Hernández en sus
plegarias y oraciones, nadie sabe quién en su infinita bondad sea apoyado con
sus intercesiones y sean el o los próximos que den testimonio de su milagro
concedido.
La Madre María de San José Alvarado, fue una religiosa
conocida bajo el nombre de Laura Evangelista Alvarado Cardozo, fue
contemporánea con el Dr. José Gregorio Hernández, por quien siempre pidió fuera
canonizado, nació en Choroní/Aragua un 26 de Abril de 1875 y muere en
Maracay/Aragua un 2 de Abril de 1967 a la edad de 92 años. Perteneció a la
Orden Agustinos Recoletos. Funda Las Agustinas Recoletas del Corazón de Jesús
de Venezuela, para ayudar a niñas abandonadas, ancianos pobres y al cuidado de
los enfermos.
El milagro que hizo posible su beatificación, fue la curación
de la Hermana Teresa Silva, quien debido a una penosa enfermedad había quedado
inválida, y la Madre María de San José años antes de que se obrara ese milagro
lo había profetizado. En decreto papal de Juan Pablo II del año 1993 fue
reconocido. En 1994 se traslada su cuerpo incorrupto al sarcófago de cristal
donde pueden apreciarla.
Fue beatificada en la Ciudad del Vaticano por el Papa Juan
Pablo II el 17 de Mayo del año 1995. Su Fiesta Litúrgica es el 2 de Abril.
La Madre Candelaria de San José, fue una religiosa conocida
por el nombre de Susana Paz-Castillo Ramírez, nació en Altagracia de Orituco/Guárico
en el año 1863 y muere en Cumana/Sucre el 3 de enero del año 1946 a la edad de
76 años. Perteneció a la Orden del Monte Carmelo, en el año 1903 viste hábito
de Las Hermanitas de los Pobres y cambia su nombre a Candelaria de San José. En
1910 funda la Congregación Religiosas Carmelitas de la Tercera Orden
Regular, Religiosas de la Madre
candelaria.
Fue beatificada el 24 de Abril del año 2008, en el mismo
Estadio Universitario de Caracas, en el estadio de beisbol de la UCV donde fue
beatificada la Madre Carmen Rendiles, por el Cardenal José Saraiva Martíns,
Prefecto Emérito de la Congregación para las Causas de Santidad, encargado por
el Papa Benedicto XVI. Tiene 2 festividades una el 31 de Enero (fecha de
fallecimiento) y la Fecha Litúrgica el 1 de Febrero.
El milagro que hizo posible su beatificación, se realizó
gracias a la fe puesta en ella por la señora Rafaela Meza de Bermúdez oriunda de
Altagracia de Orituco quien presentando un embarazo de alto riesgo por
presentar insuficiencia cardiaca, anemia, pre eclampsia, en la semana 29 de
gestación a través de un ecosonograma se le detectó ausencia de actividad
cardíaca en el feto y por ende su muerte. Fueron tanto sus ruegos para que su
bebe se salvara que cuando se le iba a practicar la limpieza de su útero
(curetaje) los doctores vieron por el contrario nacer a su hija, a quien le
puso el nombre de Milagros Candelaria, este testimonio viviente de su
intercesión también estuvo presente en la celebración de su beatificación.
Gracias Dios, gracias Jesús, gracias Espíritu Santo, gracias
Virgencita por permitirme volver a escribir, retomar este compromiso adquirido
con mi madre, con el Dr. José Gregorio Hernández y desde ahora con nuestras 3
beatas venezolanas las Madres María de San José, Candelaria de San José y
Carmen, pidiendo y orando por su santificación y sobre todo por la sanación
social, moral y espiritual de mi querida tierra Venezuela y de todos los
venezolanos.