PERSONAJES DE MI VECINDARIO X

EN EL PRADO FRANCISCO GUTIÉRREZ

Por Carmen Martínez

Este relato es un homenaje a todas las personas que en la década de los 50 hicieron posible que el beisbol y unos hermosos carnavales fueran el entretenimiento para los habitantes de mi vecindario, contemporáneos con mis padres, tíos y viejos vecinos, la mayoría ya no están entre nosotros para contarnos sus vivencias, para brindarnos sus gratos recuerdos, lamentablemente nací una década después cuando del Prado Francisco Gutiérrez quedaron solo las ruinas de la tarima del Club con el mismo nombre, lugar donde podían ir hubiese juegos o no y también donde se realizaban festividades carnestolendas y coronaban a las reinas de carnaval,

El señor Pedro Duarte me comentó que una mañana amaneció invadido y se llenó de casas y de muchas familias nuevas, ese fue el fin del Padro Francisco Gutiérrez casa de los peloteros de beisbol de mi vecindario. Hoy  la mayoría de las familias que lo ocupan, no saben cuántas historias y anécdotas se dieron tanto con el equipo de beisbol Francisco Gutiérrez y los equipos que venían de Maracaibo y otras regiones, como de los carnavales que organizaba la junta directiva del Club Francisco Gutiérrez que presidía el señor Celestino “Mamonche” Wetter. Cabe mencionar como me informó la señora Ida Urribarri que el primer presidente de este club fue el señor Simón Estrada.

Conversando con mis queridos tíos Pablo Sánchez y Cira Barrera de Sánchez sobre esa época bonita de los carnavales de antes, me di cuenta que tenían bastantes recuerdos porque ellos disfrutaron de esos carnavales, así  mismo me nombraron a otras personas de las pocas que todavía están vivas que también podrían brindarme sus recuerdos, así que me dispuse a buscar algunos y visitarlos y gracias a Dios todos ellos fueron muy amables y con mucha disposición me regalaron un poco de historia local, de tradiciones y cultura, de vivencias de mi vecindario, de vecinos, algunos de ellos dejaron buenos recuerdos en mí ya que tuve el placer de conocerlos y tratarlos.

MI tío Pablo Sánchez recuerda el Prado “Francisco Gutiérrez”, ese era el  estadio donde jugaba el equipo de peloteros del lugar, un simple prado cercado con tubos  bajos de hierro de 4 pulgadas de diámetro y atravesados por hileras de guayas, según me dijo el señor Pedro Duarte, ese cercado se los hizo la Shell con materiales de desecho de perforación de pozos, estaba ubicado en la calle El Manguito entre las esquinas de lo que hoy es la calle Francisco Gutiérrez y la calle San Felipe, donde hoy vive el señor Pedro Duarte era el Center field, donde inicia la calle Francisco Gutiérrez era el home plate y en la casa a la izquierda estaba el club con su tarima y pista de baile exterior.

Pensar que eso estaba a escasos metros de mi casa, mi mente quiere volar por esos tiempos viendo a los jugadores de beisbol, haciendo excelentes jugadas, atrapadas increíbles, cuantos jonrones no se dieron, se perderían esas bolas porque todo eso era monte, quien sabe si llegarían a la tienda del señor Wenceslao “Chalo” Ordaz, cuanta algarabía no había en las gradas con visitantes de varias partes cercanas y lejanas de mi vecindario, cuentan que grandes equipos y grandes peloteros de Cabimas amateur y profesional se dieron cita acá.

El equipo Francisco Gutiérrez, según me comentaron, las señoras Ida Urribarrí, Neris Margarita “Mayita” Florido, mi tío Pablo y el señor Pedro Duarte,  estuvo conformado por el propio Francisco Gutiérrez, su nombre se le puso al equipo, al estadio y al club luego de su muerte en un accidente que sufriera en el lago, con él la dinastía Urribarrí formada por Ciro, Antonio, Luis, Rigoberto, Trinidad, Eleazar y Jairo, amén de la madrina la misma Sra. Ida y hasta la mascota era de ellos, también Arcadio Domínguez, Antonio María Domínguez, “Larita” Domínguez, Ramón Cárdenas, Pedro Méndez, Ramón Acosta, Emigdio Matheus, Alejandro Montgomery, Alberto Sibada, Villarroel, Rafael “Fallito” Chirinos, Gertrudis “Pate e cota” Lizardo y Abraham Lennon. Ellos no estuvieron solos, sus tres madrinas cada una en su tiempo los representaron y acompañaron donde quiera que iban y jugaban, ellas fueron Ida Urribarri, Neris Margarita “Mayita” Florido y Olga Suarez. Cabe resaltar según me informaron la señora Ida Urribarrí y el señor Pedro Duarte que Pompeyo Davalillo, Víctor Davalillo  y también José “Zurdo” Pérez llegaron a acompañarlos en algunos de sus juegos.

Un pequeño aporte fotográfico a este relato fue suministrado por la señora Ida Urribarrí, fotografías en blanco y negro de la época con material de esa época, las pocas que le quedaron.

El equipo de beisbol de mi vecindario, El Francisco Gutiérrez, sentado a la derecha de la madrina Ida Urribarri, esta el jugador Francisco Gutierrez cuyo nombre le fue colocado al equipo como un homenaje póstumo.

Rafael "Fayito" Chirinos

Arcadio Dominguez

Las madrinas de los equipos Francisco Gutierrez y Manuel Felipe Tovar

Ida Urribarri, primera madrina del equipo Francisco Gutierrez, haciendo honor con su uniforme, pueden distinguir el logo identificativo del mismo FG

Qué bonito es recordar, ver como se ilumina el rostro de las personas comentando algunas anécdotas, cuenta la señora  Mayita que es como más la conocen, que cuando ella fue madrina del equipo, para buscar fondos para el equipo y el club, ella hacía unos lacitos con cintas de colores y alfileres y a cada persona que llegaba le colocaba uno, después pasaba con un pote pidiendo colaboración, lo que quisieran y podían dar, dice que desde 1 real hasta 10 bolívares le daban. Mi tío Pablo recuerda esto.

Por su parte, la señora Ida Urribarri me comentó que ella como madrina del equipo hacía muchas actividades para recaudar fondos, cabe resaltar que ellos contaban con unos miembros honorarios que contribuían con el equipo de beisbol Francisco Gutiérrez, entre ellos los doctores Darío Suarez, Echeverría (Pediatra), Rosales Altuve y los hermanos Reyes (Otorrino y abogado), La Joyería Petit y el Almacén Damasco, son los que le vinieron a la memoria, cuenta que su contribución era de 100 y 200 Bs, que en aquella época era bastante dinero.

El mismo señor Pedro Duarte  quien más conocen por Pedrito, me contó una anécdota del jugador Antonio María Acosta que tenía un problema de visión y una vez vino un equipo de Maracaibo a jugar con ellos, cuando lo vieron calentar dijeron que como era posible que el fuera shortstop (SS),  hasta se burlaban de eso y cuando comenzó el juego y lo vieron cogiendo pelotas por todos lados con una facilidad pasmosa, cambiaron de parecer. Y aún más este jugador estuvo a punto de ser firmado por el equipo profesional Centauro de Maracaibo y el no aceptó porque no quiso dejar a su madre sola.

La señora Ida Urribarrí, como su madrina fue su vocera, tanto en radio como en periódicos, siempre estuvo pendiente de que se publicaran y radiaran sus juegos, sus logros. Me comentó con tristeza que ella tenía un álbum con fotografías y recortes de periódico de todo esto, pero un día los ladrones se metieron a su casa y se lo llevaron entre otras cosas más.

El señor Pedro Duarte dice que El Prado Francisco Gutiérrez como los vecinos recuerdan a este estadio, recibió equipos AA de Maracaibo y de otras partes, aun cuando los jugadores locales no tenían esa categoría eran muy  buenos y no solo eso llegaron a ganarle a muchos de esos equipos, entre ellos recuerda el equipo de la Estrella Roja, y la señora Ida Urribarri recuerda el de la Zapatería Marbella y así como también, el equipo Manuel Felipe Tovar de los Puertos de Altagracia.

Hablando ahora de esos carnavales tan bonitos, que siempre mamá y papá me decían de chica que se hacían en la calle y que yo si hubiese querido disfrutar; hablar de ellos era hablar del Prado Francisco Gutiérrez y su organizador el señor Celestino “Mamanoche” Wetter, pero también de los vecinos de la calle y de otras zonas circunvecinas a la Rosa, como la Montañita, Gasplant, Corito, Punta Gorda, Ambrosio, entre otras, que se unían en caravanas y comparsas y salían juntos desde la calle El Porvenir. Me comentó mi tía Cira que la caravana llegaba hasta Palmarejo, cerca de donde se tomaban los ferris para Maracaibo, recuerda una de las carrozas de la reina en forma de barco, sobre un camión de estacas de cajón largo.

 Muchos me comentaron que el señor Félix Díaz vecino de la calle le gustaba arreglar carros, camionetas y camiones para acompañar en las caravanas, también que le gustaba mucho jugar con agua y bañar a los vecinos donde estuvieran fuera o dentro de sus casas, tradiciones que se han perdido.

El señor Pedro Duarte me contó que la escogencia de la reina de carnaval estaba a cargo de la junta directiva del Club y representantes de varios sectores, un mes antes del carnaval comenzaban los preparativos, las candidatas entre 16 y 18 años debían ser la representante femenina de cada sector, tener cultura, educación y conducta personal en general, sobre todo belleza y popularidad, entre otras, porque a ellas las entrevistaban y por lo menos debían saberse expresar y responder, no tener miedo escénico. No recuerda mucho los nombres de las candidatas, él estaba muy jovencito, pero mis tíos Pablo y Cira, las señoras Ida y Mayita, recuerdan por lo menos a Zoraida Morles, Consuelo Domínguez Morales y Ángela García, entre otras. Cabe mencionar que las señoritas Zoraida Morles y Consuelo Domínguez Morales fueron reinas de los carnavales del Padro Francisco Gutiérrez. Para sus coronaciones traían invitados especiales, se brindaba con cerveza y refrescos y el baile se daba al son de la música que se tocaba en un picó y discos de vinilo de 33 revoluciones o como mejor los conocimos como long play.

También estaban aquellos que alegraban estos carnavales con sus disfraces, muchos de ellos los popularizaban y hacían que otros se les unieran, entre ellos los que se disfrazaban de viejos como Rafael Chirinos y otros peloteros como Luisito Urribarrí. Los que se disfrazaban de mujer como Roberto Borjas, de las populares negritas como Abraham Lenon y Rafael Chirinos. Me comentó mi tío Pablo que él para los carnavales se mandaba a hacer unos pantalones de lino blanco y a lo largo de las costuras laterales le colocaba sonajeros, acompañados de una camisa y su careta, ese era su disfraz.

Quiero terminar este relato con algo que dijeron todos pero muy especialmente el señor Pedro Duarte, eran otros tiempos donde reinaba el respeto, no habían tantos problemas de delincuencia y por lo menos el gobierno les apoyaba con las permisos que debían tener para realizar esas actividades deportivas y de entretenimiento para los habitantes de mi vecindario y zonas circunvecinas. Nuevamente muy agradecida a mis tíos Pablo Sánchez y Cira Barrera de Sánchez, a las señoras Nerys Margarita “Mayita” Florido e Ida Urribarrí y al señor Pedro Duarte, que hicieron posible con sus recuerdos hacer este relato, ustedes también son personajes de mi vecindario y ha sido un placer conocer desde todos ustedes a emprendedores, deportistas y mujeres hermosas que vivieron en nuestro vecindario, como cualquiera de nosotros y marcaron una diferencia, en sus ordinarias vidas. A los que ya no están que sigan gozando de su gloria eterna.

La señora Nerys Margarita "Mayita" Florido

El señor Pedro Duarte