COSAS
DE ANTES. PARTE 10
Por
Carmen Martínez
Hoy quiero tratar algo que
para todos es muy triste, todos y cada uno de nosotros hemos pasado y pasamos
el motivo de este relato… son COSAS DE ANTES porque ahora es tan igual y
diferente a la vez. Son épocas y personas con personalidades, mentalidades y
costumbres distintas, son crianzas diferentes porque no puedo decir que los
sentimientos sean tan diferentes ayer a hoy… la pérdida de seres queridos,
amigos, conocidos, vecinos, compañeros de estudio o trabajo, hermanos en la fe,
cuando los queremos y apreciamos de verdad nos pega a todos… solo que cada
quien lo hace a su manera, a la forma que fue criado, o la forma adoptada por
su nueva vida o por su nueva familia y status social… en fin cuando se pierde
un ser querido tenemos escasos días para despedirlos y unos cuantos más para
sobrellevar, aceptar y sobrevivirles que son muy difíciles de estimar y es allí
donde puedo decirles que son COSAS DE ANTES: LOS VELORIOS, LOS ENTIERROS, LA
ÚLTIMA NOCHE Y EL DUELO.
Y es desde mi propia experiencia y la de
personas a mi alrededor que puedo decirles con propiedad esto, con profundo
dolor les digo que por lo menos yo he despedido a personas de mi familia de 5
generaciones, conocí a mi bisabuela y a partir de allí una buenas parte de los
adultos mayores y algunos de generaciones más recientes se han ido despidiendo
cada quien en su momento. Y es allí es donde comienzo a notar como hemos
cambiado, creo que pronto alguno de estas cosas serán realmente estampas del
pasado… serán COSAS DE ANTES: LOS VELORIOS, LOS ENTIERROS, LA ÚLTIMA NOCHE Y EL
DUELO, probable que en un mañana se adopte la petición de mi tío Chúa Sánchez, que
el día que se muera lo saquen directo de la casa, hospital o clínica al hoyo y
yo digo que actualmente a la cremación… muy probable que solo algunos puedan
acompañarlos si les da tiempo, porque eso de LOS VELORIOS largos de antes,
esperando que personas que estaban lejos llegaran eso ya es imposible, a menos
que pagues un poco más en las capillas velatorias, o que el velorio lo realicen
en sus casas…
LOS VELORIOS, me remonto a
esos años de mi niñez y de verdad que estos eran muy abrumadores, el cansancio
de aguantar 3 días o más para enterrarlos, las personas amanecían y algunos
hasta no dormían sino hasta después del entierro, sin contar que muchas veces
los que se quedaban continuaban sin el difunto… en retrospectiva estoy como si
fuera en un video y voy por todos los rincones de las casas, los patios, en la
calle, casi todo el vecindario, o el caserío estaba allí acompañando a los
deudos día y noche… un velorio de aquella época era para una familia algo
costoso, cuando el dinero no sufría de esa enfermedad de hoy o su variación año
tras año era mínima…hablo de la inflación, para ellos 5 Bs era un dineral, no
sé cuál era el gasto real de un velorio o un entierro pero era costoso para
muchos… porque no faltaba el café, el chocolate, las galletas con jamón endiablado,
el cigarrillo y si eran falconianos o de otras partes del interior del país,
hasta se hacían ollas inmensas de sopa, cantidades de arepas peladas y blancas
de maíz molido, hasta que llegó la bendita harina precocida, se mataban chivos,
gallinas o cuanto animal criaran… Cada vez que iba con mi madre y padre al
velorio de un pariente fuera familiar o no allá en el Estado Falcón esto era lo
habitual. El agua era natural, podíamos
ver que en casi todas las casas de antes había una piedra de agua en su lindo
tinajero colonial, bonito era ver como los unos hermosos helechos habitaban en
el exterior de la piedra y el agua que salía filtrada era rica, fresca, hasta
fría y uno se servía directamente y el café lo hacían por ollas y lo iban
colando en los “coladores de café hechos de tela o liencillo” porque las cafeteras
eléctricas vinieron muchas décadas después… eso del hielo, jugos, té, galletas
y demás refrigerios que hoy en día se sirven en los velorios, son COSAS DE
AHORA… los velorios de ahora tienen mucho que ver con las peticiones que en
vida hicieran las personas a sus familiares, amigos y compañeros. Mi madre que
en paz descanse nos decía que ella siempre acompañaba en los velorios hasta que
una vez el hijo de una vecina de la comunidad, sus amigos lo sacaron o lo
sentaron en la misma urna, todavía no sé cómo lo harían, le pusieron un cigarro
en la boca y se pusieron ellos alrededor de el a beberse unos tragos de ron y
cerveza…y peor fue otra vez que los amigos empezaron a echar tiros al aire con
unas armas en el velorio y cuando lo estaban sacando de la casa y por último
cuando lo estaban enterrando… hasta allí mamá iba a todos los velorios… yo vi
el caso reciente de una amiga de la difunta que en la madrugada cuando solo se
quedaron pocas personas, abrió las puertas de la sala velatoria y metió la
mitad del carro y puso la música a todo volumen… tuvieron que llamar a la
policía porque estaban molestando a los vecinos…COSAS DE AHORA decía mamá… como
es normal ahora que muchos difuntos sean velados con su urna sellada y directamente de allí pasen a las salas de
cremación para cremarlos y entregarlos… no hay ENTIERROS… No quiero dejar de
mencionar el respeto que había anteriormente por EL VELORIO Y EL ENTIERRO de
seres queridos, amigos, compañeros, vecinos… a la hora de acompañarlos hombres,
mujeres y niños usaban vestimenta de luto… el color negro prevalecía, combinado
con blanco máximo… los hombres con sus camisas blancas almidonadas y bien
planchadas con una cinta negra en el brazo amarrada, y no importando el
inclemente sol la mayoría usaba su chaqueta negra o como le decían nuestros
viejos antepasados “ el partó”, una palabra que muchos no conocen y que es un
dinosaurio ya, está entre las palabras extintas o en vías de extinción… y los
más viejos no dejaban para nada de usar su sombrero/hombres o la mantilla o
velo/mujeres.
LOS ENTIERROS, aquí si le
voy a decir que diferentes eran… en esas primeras generaciones que se murieron
en mi familia y en las de muchos de ustedes también… las urnas que diferencia…
podría decirles que no había tanto lujo como lo hay ahora… no recuerdo hasta
que año se dejaron de caminar en procesión los muertos en brazos de 6 personas
que los llevaban en su hombro, cambiándose de vez en cuando y de cuando en vez
a lo largo de esos caminos y carreteras, pasando quebradas, subiendo y bajando
cerros, en calles o carreteras primero de tierra y después de asfalto, desde su
casa a la iglesia o capilla donde le hacían sus exequias y luego de allí al
cementerio… Yo recuerdo aquí en Cabimas y principalmente en mi vecindario, que
muchas personas fueron llevadas en hombros hasta la Iglesia San Juan bautista
de la Rosa Vieja, y el carro fúnebre adelante, pero solo metían al difunto al
Salir de la misa… Muchas fotografías de esto pueden encontrar con algunos de
los adultos mayores que le quedan en sus familias, abuelos, bisabuelos… Había
mucha costumbre de tomar fotografías a los difuntos en sus urnas, en el
velorio, de todas las personas que los acompañaban y en especial de esta
procesión donde los seres queridos y amigos los acompañaban…a mí eso realmente
nunca me ha gustado… sus mejores fotografías ya están nuestros recuerdos y
corazones… Existen anécdotas de la gente de antes y que algunos de mis
contemporáneos pudieron ver, cuando llevaban al difunto en hombros y éste se les
hacía pesado, no había forma de que lo caminaran, se cambiaban de 6 en 6 personas
y no avanzaban mucho… creo que por algo de ello será el dicho… “más pesado que un muerto”, había unos que
había que meterlos al carro directamente…y aunque no lo podamos creer había
difuntos que no permitían que los llevaran a la iglesia se ponían pesados en el
camino o en la misma puerta…pero sus familiar como podían los llevaban…COSAS DE
ANTES… ayer pasó algo que me hizo escribir este relato, cuando a una joven
vecina la estaban sacando de la capilla velatoria donde le hicieron el velorio
y las exequias como es costumbre ahora, el carro fúnebre estaba abierto a las
salida de la sala y sus familiares a la usanza de sus antepasados la cargaron en hombros hasta que salieron de
los terrenos de dichas salas velatorias… me trasportó a esos tiempos de antes a
esos ENTIERROS de antes.
Pero los entierros de ahora,
son para muchos muy cómodos, hay carros y autobuses a su disposición, casi
todos los familiares y amigos tienen vehículos, antes eran escasos y todos los
que quieren tienen transporte de ida y vuelta, si son motociclistas los
difuntos, una caravana de sus amigos en ellas vemos acompañándolo, si les piden
que los saquen con música y los lleven por todo el camino con ella también, así
los complacen por todo el camino con el género de música que más le gustaban…
solo puedo decirle que si nuestros
antepasado les hubiéramos hecho eso, nos hubieran salido y jalado los pies… son
COSAS DE AHORA.
LA ÚLTIMA NOCHE… cuentan mis
padres que muy a pesar de que a veces se tardaban en enterrar a una persona
hasta 4 días no les daba tiempo a los familiares llegar a tiempo por las carreteras
distancias de caminos de tierra y casi no habían vehículos, por lo que muchos
dejaban entonces para llegar a los 9 días después del día del entierro para
acompañarlos por tan irreparable pérdida. Al siguiente día del entierro
comenzaban los “rezos” día a día se rezaba y aún hoy algunos mantienen esta
costumbre, un rosario a la Virgen… Y a los 9 días, se realizaba la llamada
ÚLTIMA NOCHE, o EL ÚLTIMO, esta celebración que hacían antes era como la de un
velorio… comenzaban los rezos a las 6 o 7 de la noche y terminaban a la media
noche con la “tumbada del altar”… actualmente algunos católicos hacen la novena
( 9 días) de misas y al llegar a las casas el rezo… y en la ÚLTIMA NOCHE, solo
rezan 3 rosarios, cosa que ya a las 10 de la noche ya están todos despidiéndose
de los familiares… “tumbar el altar”, esta celebración se hacía durante las
letanías y todas las cosas que estaban sobre el altar: fotografías de los
difuntos, la Cruz con Jesús crucificado, algunas virgencitas, velas, flores,
eran sacada una a una hacia el exterior de la casa… creencias de la gente de
antes, forma de sacar el espíritu de la persona fallecida… pero sabemos que ya
su espíritu no está ya más de 9 días que ya están con el Señor, los rezos son
un canto y una petición de todos a Dios y a la intercesión de la Virgen por el
eterno descanso de su alma... con el tiempo esto de la ULTIMA NOCHE podría ser
una estampa del pasado COSAS DE ANTES, las nuevas generaciones quizás solo
consientan hacerles la novena en las Iglesias y nada más.
EL DUELO, aquí sigo diciendo
que cuando despedimos a nuestros seres queridos cada quien a su manera llevará
su DUELO, no hay dos personas en este mundo que hagan lo mismo, no hay receta,
no hay un procedimiento, no hay reglas… solo sé que antes las personas durante
2 o más años, se vestían de negro … o como decían los viejos de antes se
“encerraban de negro” y ya al final guardaban lo que llamaban el medioluto… con
colores, negros, blancos, marrones, morados… No permitían ni televisores ni
radios… Los antepasados de mi madre y ella misma era de esa generación… mamá guardó
un luto casi eterno, desde que su padre murió… luego Jorge y muchos seres
queridos… yo no estaba con ella en eso… siempre le decía que el luto o EL DUELO
se lleva en el corazón… mi madre tenía unas expresiones, que siempre usaba para
replicarme eso… decía que esa persona que se murió no era un perro, era alguien
muy querido… cuando mi padre estaba ya en los últimos días nos dijo que no le
guardáramos luto, que no dejáramos de hacer las cosas que veníamos haciendo,
celebrar cada vez que podíamos… mi madre por el contrario sabíamos que jamás
diría eso… y como lo sabíamos le preguntábamos… mamá cuanto es el mínimo?… 6
meses no es mucho… total que cada quien sabe lo que hace… El tiempo que el
corazón sana dependerá de las actividades y del empeño que cada quien ponga
para por lo menos sobrellevarlos tranquilos y en paz, alegrando su tristeza con
nuevas alegrías que lleguen a su vida… aún hoy recuerdo a mi bisabuela y mis
abuelos, los tíos y todas esas personas que murieron cuando era niña… a mi
querido hermano Jorge que tiene más de 2 décadas que partió con Dios y a mis
padres los dos se fueron casi juntos uno detrás del otro… EL DUELO lo he
llevado, he vivido y disfrutado de otras cosas, pero los seres queridos aunque
a veces creemos que los dejamos atrás, ellos siempre están con uno… no creo que
ellos por recordarlos entren en pena, porque son momentos de momentos… creo que
si alguien en esta vida vive y se relaciona y pasado el tiempo después que
emprende ese último viaje, nadie lo recuerda es como si no hubiese vivido, no
tocó almas ni corazones… una mezcla de lágrimas, sonrisas, hasta carcajadas, pueden que salgan
cuando los recuerdo llegan a tu mente, cuando ves algo que ese ser querido hizo
o escribió, o pintó, o legó, un aroma, una comida, una prenda como las que
usaba, la forma de amar, de cantar, de reír, de soñar, de hablar, de caminar,
eso en cada quien tendrá reacciones diversas… eso es también parte del EL DUELO…
quizás si Dios me permite llegar a viejita, seguro que los seguiré recordando
como hoy aunque desde hace mucho ato ese dolor, ese luto, ese ESE DUELO se haya
apaciguado.
Ayer cuando enterraron a esa
joven vecina, muy querida y apreciada por quienes tuvimos ese privilegio de
conocerla, sucedió algo muy bonito, su padre y sus tíos paternos, sus primos,
amigos y vecinos cuando llegaron del cementerio hicieron una reunión con música
suave y brindaron como lo hacían siempre cuando se reunían todos en la familia…
como a ella le gustaba, como ella quería que la recordaran…que no le guardaran
luto… y solo les digo que con ello para nada significa que no les dolía…su
dolor estaba allí… solo alegraron un poco la tristeza que los embargaba por
amor a ella… ellos se desvivieron por cuidarla y hacer todo lo posible para que
se mejorara su salud, lamentablemente no pudo ser… Fue llamada por Dios, ella tendrá
otra misión y desde allá los cuidará… y ellos tendrán que llevar su dolor, su
luto, EL DUELO, entre llantos y risas… así cada quien irá saliendo unos
primeros que otros, algunos harán actividades impensadas, ayudaran a otros
proporcionando parte de su tiempo… EL DUELO es COSA DE ANTES y COSA DE AHORA
también… puedo decirles que antes el duelo duraba más, pero las madres que
pierden a sus hijos, aunque sobrelleven sus vidas con el resto de sus seres
queridos, su luto… EL DUELO es de por vida, es un luto eterno.
Ahí les dejo a ustedes que
tengan su propia opinión sobre todo estos, traigan sus propios recuerdos de sus propias
vivencias… y podrán decir probablemente como yo que en parte son COSAS DE
ANTES: LOS VELORIOS, LOS ENTIERROS, LA ÚLTIMA NOCHE Y EL DUELO.
Creo que en estos tiempos
que vienen de las nuevas generaciones, cuando la felicidad se entristezca por
la pérdida de sus seres queridos, harán todo como si fuera una celebración más,
bautizos, comuniones, bodas, entre otras… una empresa de eventos se encargará
de todo y ellos solos serán unos acompañantes más que tendrán todo dispuesto,
si les harán VELORIOS, si les harán ENTIERROS o los cremarán directamente, no
creo que les hagan ÚLTIMA NOCHE y probable que algunas actividades y personas
que puedan ayudarlos dispondrán para que EL DUELO les sea más llevadero.
Dedicado a mis seres
queridos, familiares, amigos, compañeros, vecinos, entre muchos más, que ya han
partido y disfrutan de la gloria de Dios y a “Mae” porque su VELORIO y ENTIERRO
me inspiraron para hacer este relato.