Por Carmen Martínez
Antes de culminar el año 2014 realicé un viaje a la querida
tierra natal del Venerable y siempre Siervo de Dios Dr. José Gregorio
Hernández, a Isnotú en el estado Trujillo/Venezuela, al Santuario del Niño Jesús, donde está su centro de oración, como el
todavía no ha sido beatificado ni santificado, no puede llevar su nombre pero
es allí donde todas las personas que les han sido concedido favores o a pedir
por su intercesión ante sus problemas de salud, van con mucha fe y devoción.
Recientemente por
motivos de la celebración del 150 aniversario de su natalicio, habían realizado
unas remodelaciones y quise ir a actualizar las fotografías que hasta ahora he
publicado en los relatos anteriores de esta serie y sobre todo tratar de ver si
obtenía noticias nuevas sobre su causa, o sobre los milagros que hacen falta
para su canonización.
Llamó mi atención que la mayor parte de los muros y columnas
exteriores al Santuario están tapizados de plaquitas alusivas al agradecimiento
del favor concedido, no se indica la naturaleza del mismo, pero de seguro que
la sanación de un ser querido es la razón, milagro o no, dice mucho de la fe
que en él tienen… y sigo sin entender cómo es posible que 1, 2 o 3 milagros
entre tantos favores concedidos no se hayan podido validar.
Era muy temprano en la mañana cuando me acerqué allá, la paz
que en él había quizás era también sinónimo de que muy pocos habían llegado,
apenas se estaban abriendo las
instalaciones, el Padre Reinaldo Pacheco a cargo de todo en el Santuario me
informó que solo se hacen celebraciones eucarísticas a las 6pm, me entristecía
saber que no podía quedarme más tiempo y no escuchar una celebración allí, más
sin embargo las puertas abiertas están desde bien temprano para ir a orar con
Dios y Jesús, agradecer por todo y por
todos, en especial por los encomendados
en sus enfermedades, por todos aquellos que le he pedido la intercesión a
través del Dr. José Gregorio Hernández… hay tanto que agradecer más allá de esa
hermosa oportunidad de haber podido ir hasta Isnotú después de más de 6 años.
Cuando pude hablar con el Padre Reinaldo Pacheco sobre la
causa del Dr. José Gregorio Hernández, me di cuenta que tener información sobre
ella era casi imposible, según me informó el Padre Reinaldo, todas las Diócesis
del país están trabajando en ello, todo milagro que llega es enviado a la
Arquidiócesis de Caracas en Montalban, que todo lo que llega a cualquiera de
ellas viene sellado, inclusive las que ellos reciben y ellos solo se encargan
de hacerlos llegar a la Causa de
Santificación del Dr. José Gregorio Hernández en la Arquidiócesis de Caracas.
Que ellos no pueden dar ninguna información porque la desconocen. No pude tener
una fotografía del Padre Reinaldo Pacheco, porque todavía no estaba con la
vestimenta adecuada.
Recorrer con mi cámara los muros y pilares tapizados, cada
espacio en el pequeño sitio destinado al Dr. José Gregorio Hernández, que como
dije no puede llevar su nombre porque no ha sido ni beatificado ni santificado,
pero su devoción va desde su repentina muerte, estoy segura que muchos favores
y porque no milagros, ni siquiera están expuestos, cuantos ni siquiera han sido
informados ni verbal ni en sobre sellado, ni puestos en una plaquita, que ni
alcanzarían los pocos espacios en los muros que faltan por llenar… ¿Cómo harán
cuando los muros y pilares se acaben?… quizás no haga falta, ya el Dr. José
Gregorio Hernández haya sido canonizado, las oraciones y agradecimientos vayan
directamente al cielo junto a Dios que lo tendría junto a todos sus Santos y
Santas.
La única información que el Padre Reinaldo Pacheco me dio,
fue que se estaban preparando las actividades para la celebración de los 150
años del bautizo del Dr. JGH a realizarse en el mismo lugar donde se realizó,
el día 30 de enero en la Iglesia Dulce
Nombre de Jesús en Escuque/Trujillo. Desde aquí invito a los que puedan
asistir a estas celebraciones.
Me gustó ver como una buena parte de la información biográfica
del Venerable y siempre Siervo de Dios José Gregorio Hernández, medico de los
pobres y necesitados, hombre de ciencia y fe, fueron incluidas en esa
remodelación, así nativos y extranjeros que lleguen hasta allí pueden conocerlo
mejor.
Sigamos pidiendo desde nuestro corazón por su pronta
canonización siempre a Dios quien es el dador de divinidad a todos sus elegidos,
que el Papa Francisco sea quien lo confirme en la tierra. Pidamos porque no
solo sea uno, ni dos ni tres, que lleguen muchos milagros a su causa. Cuando
comencé a escribir este artículo conocí a una persona que me preguntó acerca de
esto, son milagrosos por sí mismos o a través del don divino, muy interesante
esa pregunta y todos debemos estar claros, nadie es sanador y milagroso sino lo
es a través de nuestro Señor y de su amado hijo Jesús, es un don divino y estoy
segura que si lo hacen es porque Dios les concede esa gracia que muchos no
tienen, por su fe, por sus obras y servicios en su nombre para con sus hijos en
todo la tierra.
Quiero aprovechar de informarles a aquellos no van en
vehículos propios que pueden llegar hasta Isnotú, desde la ciudad de Valera
utilizando la ruta de autobuses turística Bus
Trujillo, los hay que van a Escuque-Isnotú, el Santuario de la Paz, La
Puerta, un viaje confortable y la atención muy buena, bajo costo. Tuve la
oportunidad ese día de viajar con el conductor Richard Estrada quien muy amable
me indicó donde quedarme y señalar el Santuario desde la vía principal que solo
queda a escasas 2 cuadras caminando. Siempre queda la opción de la ruta de
siempre: las busetas de Escuque-Valera,
que las pueden tomar a una cuadra del Santuario Niño Jesús.
Estas son algunas de las fotografías que tomé de la visita
realizada, espero que ustedes tenga también la oportunidad de apreciarlas
cuando puedan venir hasta acá. Los invito a visitarlo.
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